La respuesta que dejó Fiddes en la entrada anterior bien se merece un comentario un poco más extenso. No llega a preguntarme qué creo que es el estado de las autonomías, pero casi. Y la verdad es que no lo sé, o mejor, que carezco del vocabulario necesario. Para entenderme, parto de la afirmación de Gabilondo analizando el debate de que no existe un estado central opuesto a las autonomías porque este estado central es la suma de las autonomías. Hoy en día sí existe esa oposición (estoy totalmente de acuerdo con fiddes), que además crea un entramado burocrático que en ocasiones se solapa y en ocasiones deja agujeros abiertos en el sistema. La bronca sobre la aplicación de la ley de dependencia es el último, pero con la ley antitabaco ya pasó lo mismo (no hablamos ya de sanidad, educación o asutos de más envergadura). Que la teoría de Gabilondo diga lo que quiera, pero a día de hoy no se ha resuelto este conflicto entre estado y autonomías. Ni tampoco entre autonomías y diputaciones, ni entre éstas y los ayuntamientos (que por eso nadie arreglaba el agujero de la avenida de Galicia, ni cien metros de la carretera de mi pueblo hace años).
Hasta aquí, simplificando, lo que hay. ¿Problema añadido? Vuelvo a estar con fiddes cuando me contestaba que esto es una casa de putas, que esto ni es un estado federal ni es nada. Digamos que, en mi ignorancia, veo los dos extremos. En uno, un estado central lo controla todo en una estructura jerárquica y piramidal. En el otro, el estado central fija unos mínimos muy mínimos (cuatro derechos básicos) y cada uno se organiza como quiere. En España no tenemos ni una cosa ni la otra o, al menos esa impresión da. Vuelve a tener razón fiddes cuando me dice que no se negocia en igualdad de condiciones. O, en sus palabras, "Ay, que sería de de Cataluña y el País Vasco si estuvieran en un estado federal y tuvieran que tomar las decisiones en conjunto con el resto de regiones, les iba a salir todo rana". Y así, con nuestro sistema híbrido, nadie está contento del todo. Unos, porque quieren que se les suelte más. Otros, porque como ven que a otros se les da, quieren lo mismo. Que luego no se sepa qué hacer con lo recibido es otra historia.
Y hasta aquí puedo leer sin entrar en el juego que se traen con todo este asunto los partidos políticos, que esa es otra historia.
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Hasta aquí, simplificando, lo que hay. ¿Problema añadido? Vuelvo a estar con fiddes cuando me contestaba que esto es una casa de putas, que esto ni es un estado federal ni es nada. Digamos que, en mi ignorancia, veo los dos extremos. En uno, un estado central lo controla todo en una estructura jerárquica y piramidal. En el otro, el estado central fija unos mínimos muy mínimos (cuatro derechos básicos) y cada uno se organiza como quiere. En España no tenemos ni una cosa ni la otra o, al menos esa impresión da. Vuelve a tener razón fiddes cuando me dice que no se negocia en igualdad de condiciones. O, en sus palabras, "Ay, que sería de de Cataluña y el País Vasco si estuvieran en un estado federal y tuvieran que tomar las decisiones en conjunto con el resto de regiones, les iba a salir todo rana". Y así, con nuestro sistema híbrido, nadie está contento del todo. Unos, porque quieren que se les suelte más. Otros, porque como ven que a otros se les da, quieren lo mismo. Que luego no se sepa qué hacer con lo recibido es otra historia.
Y hasta aquí puedo leer sin entrar en el juego que se traen con todo este asunto los partidos políticos, que esa es otra historia.
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1 comentario:
Solo quiero hacerte un par de matizaciones: La primera hace referencia a la expresi�n que utilizas de �estado central�. Mi preferencia es optar por llamarlo �estado unitario� porque utilizando estado central podemos caer en la idea de centralizaci�n vs. descentralizaci�n que es un hecho diferente. Esto �ltimo se refiere a la forma, m�s pr�ctica, del funcionamiento real de la administraci�n p�blica, es decir, al hecho de que las administraciones sean m�s legalista y por lo tanto m�s dependiente de la precisi�n de sus actuaciones con respecto a los mandatos provenientes de una jerarqu�a que, como tu se�alas, suele ser piramidal (con supuestas ventajas como un mayor control de la actuaci�n p�blica y la desventaja del yo me lavo las manos que esto viene de arriba) y un estado descentralizado donde los m�rgenes de maniobra son mayores a la hora de la actuaci�n por parte de las subunidades de la administraci�n como una delegaci�n de una provincia por ejemplo (con desventajas como la posibilidad de agravios comparativos de una zona a otra o una mayor corrupci�n y con la ventaja de un trato m�s sim�trico entre ciudadano y funcionario). Esta centralizaci�n o descentralizaci�n se puede dar tanto en el modelo de estado unitario como en el modelo de estado federal, de hecho en Espa�a tenemos un estado federal asim�trico y centralizado, lo famosos 17 reinos de Taifas.
La segunda cosa es que has pasado en tu comentario muy de puntillas por la cuesti�n de la asimetr�a, y tambi�n, y sobretodo, por la cuesti�n de c�mo se percibe Espa�a por parte de sus ciudadanos, que repito, es la cuesti�n central de todo a mi entender (todos ven a Espa�a como un estado unitario, bien porque les tiraniza, o sea los independentistas, bien por que lo perciben simplemente as� los dem�s).
Para mi, Espa�a deber�a de ser un estado unitario y a ser posible descentralizado (paso de federalismos cuando adem�s todos los estados federales acaban por actuar de forma unitaria debido a la fuerza centr�peta de la igualdad casos de Alemania o EEUU) Y si no les gusta a los independentistas que se vayan a tomar por el culo. M�s vale ser buenos vecinos que malos compa�eros de piso.
Por �ltimo una pregunta: �y con respecto a Europa? �Cu�l debe ser la configuraci�n de esta? �C�mo entiendes t� a Europa?
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