La semana pasada la notica que ocupó un par de titulares se relacionaba con la petición de una mujer de ingresar en las Capas Pardas. El procedimiento comienza enviando la petición al obispado, que, después de dar su veredicto, envía la solicitud a la cofradía, que da o no el visto bueno. El Obispo, ejerciendo un poco de Pilato, se lavó las manos y pasó el muerto a la cofradía, qie dijo que nones, que de mujeres nada. Al calor de la disputa, y preguntados en interminables suplementos dominicales, varios presidentes, abades y demás cargos procesionales, la mayoría apuntaba en la misma dirección: Que no.
Hoy, ahora mismo, acabo de ver en el telediario que varios colegios zamoranos (la Milagrosa a la cabeza, pero no el único) han organizado miniprocesiones donde los alumnos y alumnas ejercen de cofrades y cofradas (con caperuzos de cartulina), de cargadores y cargadoras (con minipasos de cartón), de policíos y policías (de los que cierran los desfiles), y con lo de párrocos y párrocas (de los que cierran cada procesión) me parece que no se atrevieron por eso de no cometer sacrilegio. Para inculcar a los criaturos y criaturas la religiosidad y la pasión de esta semana, decían. Pues muy bien, pero a ver quien les explica a las criaturas femeninas, a las alumnas que hoy miniprocesionaban, que cuando quieran solicitar su admisión en cofradías de verdad, de las de los mayores, salvo en un par de excepciones la respuesta va a ser que no porque no. Que se lo expliquen las monjas que organizaron el sarao y que al menos en público manifiestan su apoyo a las medidas de las altas esferan que siguen promoviendo la separación por sexos y la sumisión femenina en la jerarquía de la iglesia católica (como en la mayoría de las religiones, por otra parte). Que hagan lo que quieran, que para eso son un club privado. Que hagan lo que quieran, pero, por una parte, no tan "lo que quieran" cuando hay mucho dinero público de por medio y, por otra, más tontas son las mujeres que comulgan con semejante credo. Las que pueden decidir, al menos, que ya sé que no todas pueden. Que ni me va ni me viene, ya lo sé, pero a ver quién escapa a la Semana Santa estando en Zamora.
Hoy, ahora mismo, acabo de ver en el telediario que varios colegios zamoranos (la Milagrosa a la cabeza, pero no el único) han organizado miniprocesiones donde los alumnos y alumnas ejercen de cofrades y cofradas (con caperuzos de cartulina), de cargadores y cargadoras (con minipasos de cartón), de policíos y policías (de los que cierran los desfiles), y con lo de párrocos y párrocas (de los que cierran cada procesión) me parece que no se atrevieron por eso de no cometer sacrilegio. Para inculcar a los criaturos y criaturas la religiosidad y la pasión de esta semana, decían. Pues muy bien, pero a ver quien les explica a las criaturas femeninas, a las alumnas que hoy miniprocesionaban, que cuando quieran solicitar su admisión en cofradías de verdad, de las de los mayores, salvo en un par de excepciones la respuesta va a ser que no porque no. Que se lo expliquen las monjas que organizaron el sarao y que al menos en público manifiestan su apoyo a las medidas de las altas esferan que siguen promoviendo la separación por sexos y la sumisión femenina en la jerarquía de la iglesia católica (como en la mayoría de las religiones, por otra parte). Que hagan lo que quieran, que para eso son un club privado. Que hagan lo que quieran, pero, por una parte, no tan "lo que quieran" cuando hay mucho dinero público de por medio y, por otra, más tontas son las mujeres que comulgan con semejante credo. Las que pueden decidir, al menos, que ya sé que no todas pueden. Que ni me va ni me viene, ya lo sé, pero a ver quién escapa a la Semana Santa estando en Zamora.
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3 comentarios:
No son club privados, son hermandades, sufragadas con el dinero de todos y que circulan y dan la turra por las calles de nuestra ciudad y alteran nuestro ritmo vital durante una semana entera en una ciudad y un país supuestamente laicos.
Y no es mi batalla la de las mujeres en las cofradias, ni yo la libraré nunca, y quizás nos sea lo más importante pero cada vez me empieza a parecer peor.
Claro que hay a un señor que le parece peor todavia y lei hace dos semanas en la Opinion que en la revisión de estatutos de la hermandad (no me acuerdo de qué procesión) solicitó la aceptación de mujeres (vamos que harian cola y esperarian años igual que todos) y los hermanos allí presentes se negaron en la votación. Pues bien este señor les va a llevar a juicio que pare eso existe la ley de igualdad en este país, y se ha comprometido a llevar a jucio al resto de las hermanadades a las que él pertenece para que aceptena mujeres.
Sé que es
to de la semana santa es un poco chorrada y ni me va ni me viene pero si seguimos dejando que a estos niveles haya semejante discriminación nunca vamos a llegar a erradicarla de niveles más altos. Si no fuera por personas que hace 30 años se enfrentaron a cosas aparenemente nimias e insignificantes, yo ahora mismo estaría preparando la cena a mi adorado marido, fregando toda la casa y criando a mis 4 hijos, (que no digo que esté mal, pero no podría haber elegido qué hacer)
Toma parrafada y mira que yo siempre he sido poco feminista....^^
Nunca he terminado de entender porque la sociedad sostiene tan férreamente la libertad individual y minusvalora la libertad de asociación. También creo percibir, y me sorprende, que dentro del grupo de personas que apoyan la libertad del matrimonio entre maricones, conste que yo también lo apoyo, la mayoría tienen también ideas feministas y, ¿si se casan dos maricones donde queda la paridad hombre-mujer?.
Siento decirte Sintele que estamos en un estado aconfesional y no laico, lo cual supone que el estado financia las confesiones sean cual sean estas. El estado financia muchas cosas (por mi cuantas menos fueran mejor, las básicas y fundamentales: sanidad, educación, pensiones e infraestructuras) como museos, obras artísticas, financiación para una ley de igualdad (ley que beneficia solo a las mujeres), etc.
Pareceré machista y es que lo soy, si las mujeres son feministas a mi no me queda más cojones que ser machista (a estas alturas yo creo que no hablamos de igualdad de oportunidades, eso ya lo tenemos superado supongo yo, hablamos de algo más) no voy a apuntar los cañones a los de mi bando aunque haya muchos de los míos que lo hagan (y los entiendo porque para ligarse a la princesa de turno pues pregonar que eres machista o antifeminista resta unos cuantos puntos)
Soy liberal con el individuo (que cada cual haga lo que buenamente pueda y quiera) y hasta con los grupos, los clubes, las asociaciones… vamos que no me voy a ponerme pesado con pertenecer a un club de gordos, o ingresar en un convento de monjas descalzas.
Y si las mujeres quieren que en una procesión de tal hermandad zamorana salgan feminas, pues yo quiero que los vestuarios de la piscina de Zamora sean mixtos, porque si somos iguales ¿porque me obligan a ver solo a los hombres en pelotas?
En definitiva, creo que la igualdad no es tan buen invento, a mi me gusta jugar más con el cacharro ese de la libertad, aunque no sea tan moderno.
La religión es algo muy personal, lo básico, como bien apuntas, es lo que los políticos están obligados a mejorar para los ciudadanos que lo pagamos. Las religiones que se las pague cada uno. Y si una asociación, que se mantiene por sus socios, decide no permitir la entrada a las mujeres, yo lo acepto, aunque no por eso deja de ser discriminatorio. Pero si está en juego mi dinero como contribuyente, me parece lógico que un sector de mujeres proteste enérgicamente ante este hecho. Y eso es machismo. Lo mires por donde lo mires. Y en cuestión de sexo no somos iguales, piénsalo. No saquemos las cosas de lugar. Y la igualdad es un invento excelente, pero la verdadera igualdad de oportunidades. Quien valga más, adelante, sean todos mujeres o todos hombres.
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